El baño de los hombres es un lugar al que se dirigen cuando tienen la necesidad fisiológica de deshacerse de fluidos corporales no deseados. No es una tarea que particularmente deseen hacer acompañados. De hecho, como las normas de privacidad son menos flexibles ahí, es muy importante que controlen hacia donde se enfoca su mirada en todo momento. Es muy recomendable el techo o el suelo y se desalienta mirar hacia los lados, porque puede malinterpretarse como estar “midiendo” a la competencia. La única razón por la que los hombres se acompañan al baño es si uno de ellos está casi inconciente y amenaza con redecorar las instalaciones.
El baño de las mujeres es muy diferente. Se puede describir como una especie de “Centro de Operaciones” donde se deciden cuestiones de vital importancia. La excusa, claro, es el retoque del maquillaje y la verificación del estado del atuendo y el peinado, pero el trasfondo es mucho más profundo y tiene que ver con las reglas no escritas de la hermandad femenina.
En el baño de mujeres, por ejemplo, se reúne el Comité de Evaluación del Galán. Un grupo de chicas altamente calificadas da su valoración sobre elementos como vestuario, comportamiento, datos obtenidos sobre su pasado sentimental, historias conocidas sobre su ex novia y pronósticos sobre las probabilidades de éxito con la amiga según las señales no verbales observadas hasta el momento. Se revisan también ojos, nariz, boca, corte de pelo, sonrisa, brazos, nivel de vellosidad y por supuesto, las pompis. Eso que ellos hacen abierta y descaradamente nosotras lo hacemos en el baño de mujeres.
En el recinto también se da cita el Comité de Rescate en Contingencias Emocionales. Entre los casos que caen bajo su jurisdicción es, por ejemplo, el de la ruptura de una amiga con el galán, que despiadadamente acaba de cortar con ella. Inmediatamente, un grupo de expertas se reúne para increpar al bastardodesgraciadohijodelmal, sopesar la responsabilidad de la zorra esa con la que lo han visto, asegurarle que no es porque está gorda, proveer una considerable cantidad de Kleenex, sugerir posibles distracciones y pronosticar el regreso del novio pródigo, hincado y arrepentido al ver lo que perdió ( en momentos de crisis se permite el pensamiento mágico).
En el baño de mujeres se intercambian consejos de belleza, tips de cocina, títulos de libros y películas, anécdotas, recomendaciones de ejercicio, salud, dieta, moda y relajación. Se comparan ciclos menstruales y la intensidad de los síntomas sufridos. Se discute pasado, presente y futuro. Se da terapia individual y de grupo. Se cubren imperfecciones externas e internas, se forjan amistades y enemistades, se descubren secretos, se pactan alianzas, se elaboran estrategias. El baño de mujeres es un refugio, un lugar seguro para la reflexión y la toma de decisiones.
Lo único importante que hay que recordar, mis queridas estrógenas, es que mientras todo esto sucede, los hombres se quedan SOLITITITOS allá afuera, en SU propio y feliz centro de operaciones.
Por eso, es importante dejar siempre un escuadrón de vigilancia, que reporte incumplimientos y anomalías. Si las hay, las consecuencias probablemente serán definidas por el Comité de Honor y Justicia.
¿Dónde?
¿Dónde más?
jaja que bobo pero entretenido jajaja no todo es asi pero jejeje es divertido
ReplyDeletePues mira... nunca he estado ahí, ni por error, ni de incógnito, ni por emergencia, salvo la vez que cumplía con la fantasía de un affaire* :s (a propósito de deportes extremos)... pero por lo que dices, y que de paso se agradece por la información clasificada, suena equivalente a lo acontecido en lo conocido como Club de Toby; por lo general frente a una barra de Cantina o Bar (cantinero incluido).
ReplyDeletePor cierto, sigo esperando el Post prometido sobre las Mamis de temporada, o algo así.
*parte de este comentario puede ser ficción
JAJAJAJAJAJAJAJAJA MUY BUENA MAX
ReplyDeletejajajaja me parece que la descripción de las actividades "extracurriculares" en el baño de mujeres es muy buena. No todas lo hacemos pero, casi puedo apostar, que todas alguna vez hemos visto alguno de estos comités en junta.
ReplyDeleteCreo que olvidaron mencionar la razón más importante por la que una va al baño acompañada por, al menos, una amiga y esa es... que te detenga la puerta del baño que nunca sirve!!! jaja o, en su defecto, porque sabes que la otra, en su bolsa magica, tendrá Kleenex por si no hay papel como debería!!!
Felicidades chicas! Soy su fan!!
¡Gracias Isacielo! Nosotras también somos tus fans. ¿Y cómo pude olvidar el asunto de detener la puerta? Indispensable, vital, totalmente necesario.
ReplyDeleteChicos y chicas, como prueba de las enormes diferencias entre las reglas de etiqueta que prevalecen en el baño de hombres versus el de mujeres, disfruten este ilustrativo video que nos hizo llegar nuestro amigo Juan Pablo Manazza.
ReplyDeleteEste es el link:
http://bit.ly/16AbIq
Si he entendido bien, hacéis de todo menos para lo que esta pensado. Cuando abra un local de moda, en el servicio de señoritas/señoras pondré sofás, mesas y taquígrafas para las actas. Mientras mas mujeres en un local más borrachos abra (me incluyo).
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